Nos gustaría compartir con ustedes una bonita historia de amor por los libros que nos viene de la ciudad de Córdoba, en Argentina y que tomamos prestada de La Voz. Es la historia de Ninfa Mabel Lubrina, una bibliotecaria de noventa y ocho años de edad y que lleva ejerciendo como bibliotecaria durante casi setenta años.
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| Ninfa Mabel Lubrina lleva casi siete décadas dedicada a los libros. |
Entró por primera vez en una biblioteca cuando tenía cinco años y, ya desde entonces, nació en ella un especial interés hacia los libros y la lectura.
Cuando le preguntan por el secreto para estar saludable, responde que es "no dejar de leer nunca". En su caso, el hábito lo adquirió de su madre, que fue una gran lectora y por ello tenían en casa una gran biblioteca.
Durante sus largos años de profesión, siempre ha procurado recomendar el libro más apropiado para cada lector, en cada momento. Es una firme defensora de la lectura y, especialmente, en formato impreso, aunque no se considera reacia a los cambios y las nuevas tecnologías, de hecho, ella misma explica lo mucho que ha cambiado el papel de la mujer durante sus casi cien años de vida, puesto que ha sido testigo privilegiada.
Si desean conocer mejor a esta formidable mujer, pueden leer el artículo completo en el siguiente enlace:
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